Los inversores de criptoactivos ya saben que la tributación del activo sufrió cambios en 2024, como el fin de la exención para ventas de hasta R$ 35 mil mensuales (ganancia de capital). Mientras tanto, muchos prefieren mantener las inversiones en una autocustodia, lo que puede ser ventajoso en algunos aspectos, más peligroso en otros. Y es precisamente en el control de los impuestos donde puede haber algún problema, llevando al inversor a pérdidas. Luis Fernando Cabral, contador especialista en inversiones, socio del Contador del Trader, explica que la tributación correcta puede ayudar a maximizar las ganancias
"Quien le gusta invertir en criptoactivos está buscando multiplicar sus ganancias y un rendimiento por encima del mercado". Para que esto suceda, muchos inversores prefieren hacer todo solos, desde las aplicaciones hasta la contabilidad. Se, por un lado, esto ayuda a los inversores a tener un mayor control sobre sus inversiones, por otro lado puede suceder justamente lo contrario, es decir, perder lo que se ha invertido, además de dejar pasar algún detalle en la contabilidad, afirma el especialista
En primer lugar, al mantener criptoactivos en autocustodia se corre el riesgo de perder contraseñas y claves de acceso y perjudicar el almacenamiento de datos. Los especialistas en el tema recomiendan una copia de seguridad, además de anotar las contraseñas en un papel, en el mejor estilo tradicional. Mientras tanto, no es solo en la cuestión de acceso a las criptomonedas donde puede haber algún problema, pero, también, en relación a la tributación. "La declaración de los criptoactivos como bienes en el Impuesto sobre la Renta y el pago de impuestos son obligatorios", solo que los plazos pueden perderse si el inversor en autocustodia no conoce los detalles de cada tipo de inversión, resalta Luis Fernando
El fin del año, de acuerdo con el especialista, es una excelente oportunidad para que el inversor de criptoactivos ponga en papel y haga todos los cálculos de las ganancias y las pérdidas que tuvo a lo largo del año, para poder comenzar el nuevo año fiscal al día con la información de sus inversiones. “Y esa es la salvedad de quienes hacen inversiones en autocustodia, es el riesgo de dejar pasar alguna información y algún plazo. Al fin, una contabilidad especializada en el tema guardará esta información desde el inicio del año, explica el contador
