La protección de datos se ha convertido en una cuestión de extrema importancia en el contexto actual, donde la digitalización y la interconectividad forman parte de la vida cotidiana de más de 5,5 mil millones de personas, como señalado por Statista en 2024. El aumento de los ataques cibernéticos y la ampliación de regulaciones, como la Ley General de Protección de Datos (LGPD), destacan la necesidad urgente de medidas eficaces para garantizar la seguridad de la información.
En 2024, el informe de Cybersecurity Ventures proyectó que los daños globales causados por delitos cibernéticos superarán los US$ 10,9 billones anuales hasta finales de 2025, un aumento del 22% en relación al año anterior. Además de eso, Un estudio del Ponemon Institute indicó que el costo promedio de una violación de datos en 2024 es de US$ 4,86 millones, siendo las pequeñas y medianas empresas las más vulnerables.
La necesidad de ser rápido, por lo tanto, exige que las empresas prestadoras de servicios tengan un papel activo y colaborativo en la formulación de estrategias eficaces para proteger datos sensibles, asegurar la privacidad de los ciudadanos y preservar la confianza de los consumidores en un entorno cada vez más complejo y desafiante
Gilberto Reis, COO de Runtalent, empresa de referencia en Soluciones Digitales, enfatiza la responsabilidad de las organizaciones en garantizar la seguridad de la información de sus clientes y socios. La protección de datos nunca ha sido tan esencial como ahora. La tecnología avanzó rápidamente y, con ella, las amenazas digitales también se multiplicaron. Las empresas deben estar preparadas no solo para proteger la información sensible de sus clientes, pero también para garantizar la continuidad de sus negocios. Para eso, invertir en seguridad de datos ya no es una cuestión de elección, afirma el ejecutivo
Con el aumento de las amenazas, como ransomware y filtraciones de datos, las empresas necesitan adoptar un enfoque proactivo e integrado. Además de invertir en tecnologías avanzadas de prevención, como criptografía y monitoreo en tiempo real, es esencial que las organizaciones promuevan una cultura de conciencia y capacitación continua entre sus empleados. Só así, será posible mitigar riesgos y proteger la integridad de los datos de manera eficaz, evitando daños irreparables a la reputación y a los negocios, complementa Caio Abade, Ejecutivo de Ciberseguridad de Betta Global Partner, empresa integradora en soluciones de T.Yo y ciberseguridad
Protección de datos y legislación
La Ley General de Protección de Datos (LGPD) exige que las empresas adopten prácticas rigurosas para evitar filtraciones y abusos, garantizando la confianza del público. Eso significa más que simplemente cumplir la ley – significa respetar el derecho a la privacidad y proteger los datos de sus consumidores de forma ética y transparente, destaca Karina Gutiérrez , abogada del despacho Bosquê Advocacia.
La abogada destaca que los riesgos cibernéticos afectan, además de las grandes corporaciones, los pequeños negocios que, muchas veces, no están preparados para lidiar con la complejidad de las regulaciones de protección de datos, como la LGPD. ⁇ La legislación establece obligaciones estrictas para empresas sobre el tratamiento de datos personales, incluyendo la necesidad de obtener consentimiento explícito y garantizar seguridad en el almacenamiento. En caso de filtración, las empresas pueden ser multadas en hasta 2% de la facturación anual, con un techo de R$50 millones, además de enfrentar daños a la reputación y acciones judiciales ⁇, explica
Como se proteger
Para evitar la filtración de datos, los expertos proporcionan algunos consejos principales que deben ser seguidos por empresas o usuarios comunes
1. Use contraseñas fuertes y autenticación multifactor
Para individuos y empresas, la seguridad comienza con contraseñas robustas. Evita contraseñas simples y usa combinaciones largas y complejas. Además de eso, implementen la autenticación multifactorial (MFA) en todas las cuentas, tanto personales como corporativos. Esto añade una capa extra de protección, dificultando el acceso indebido incluso si la contraseña sea descubierta. Organizaciones deben garantizar que todos los colaboradores utilicen MFA, especialmente en sistemas críticos, como correos electrónicos corporativos y plataformas financieras
2. Mantén dispositivos y softwares actualizados
Las actualizaciones regulares de sistemas operativos y aplicaciones son de extrema importancia para corregir vulnerabilidades de seguridad, tanto para individuos como para empresas. Muchos ataques cibernéticos explotan fallas en softwares desactualizados, por eso nunca posponga las actualizaciones. Para empresas, es importante configurar dispositivos y sistemas para actualizaciones automáticas y aplicar inmediatamente los patches de seguridad, asegurando que todos los empleados estén protegidos contra las últimas amenazas
3. Cuidado con correos electrónicos y enlaces sospechosos
El phishing es una de las tácticas más comunes utilizadas para el robo de datos. Tanto individuos como organizaciones deben ser cautelosos con e-mails o mensajes de fuentes desconocidas. Nunca haga clic en enlaces o descargue anexos sospechosos. En el ambiente corporativo, es esencial realizar entrenamientos regulares de concienciación sobre seguridad digital para los empleados, ayudándoles a identificar correos electrónicos fraudulentos y a verificar la autenticidad de solicitudes sensibles
4. Criptógrafo información sensible
La encriptación es fundamental para proteger datos confidenciales, sean personales o empresariales. Para individuos, encriptar documentos importantes antes de compartirlos o almacenarlos online es esencial. Empresas deben adoptar encriptación en todos los niveles, incluyendo datos en tránsito, en reposo y en backups, para garantizar que, incluso en caso de acceso no autorizado, los datos no pueden ser leídos sin la clave adecuada
5. Revisa los permisos de privacidad de aplicaciones y redes sociales
Es importante revisar regularmente las configuraciones de privacidad, tanto en dispositivos personales como en sistemas corporativos. Para individuos, eso significa controlar quién tiene acceso a su información personal en aplicaciones y redes sociales, limitando el intercambio de datos sensibles. Para empresas, es esencial establecer políticas claras sobre el uso de aplicaciones y el acceso a datos internos, asegurando que los colaboradores no compartan información corporativa con herramientas no autorizadas. Además de eso, se debe monitorear constantemente los permisos de aplicaciones usadas en la organización, para evitar el acceso excesivo a datos sensibles