Hace pocos años, los consumidores solían comprar por impulso, sin mucha investigación, confiando ciegamente en la propaganda. Ahora, piensa en ese mismo consumidor en 2025. Él compara precios en tiempo real, lee evaluaciones, exige entrega rápida y, más que nunca, quieres saber el impacto socioambiental de lo que estás comprando. Pues sí, el juego cambió. Y el mercado se está adaptando – te estás quedando atrás
El Día del Consumidor, celebrado el 15 de marzo, ya no es solo una excusa para promociones y campañas de marketing. Se convirtió en un termómetro de las relaciones de consumo, evidenciando un escenario en constante mutación. Según la Confederación Nacional del Comercio (CNC), las ventas en el comercio minorista digital crecieron un 12% en 2024, mientras el comercio minorista físico avanzó solo un 3%. Esto refuerza lo que ya sabíamos: quien no está en lo digital, está perdiendo espacio
Otro dato interesante proviene de la Asociación Brasileña de Comercio Electrónico (ABComm). Cerca del 78% de los consumidores abandonan el carrito de compras antes de finalizar la transacción (2023). El motivo? Experiencia mala, plazos largos de entrega y precios incompatibles con el mercado. Es decir, conquistar un cliente nunca ha sido tan difícil, y perderlo nunca fue tan fácil
Y existe un fenómeno aún más relevante: el ascenso del consumidor consciente. Un estudio de Nielsen (2024) indica que el 73% de los brasileños prefiere marcas con compromisos ambientales y sociales claros. La etiqueta "sostenible" dejó de ser un diferencial y se convirtió en un requisito. Las empresas que no demuestran prácticas responsables corren el riesgo de ser descartadas sin dudar
¿Qué significa esto para el mercado?? Sencillo, o te adaptas o te vuelves irrelevante. Quien invierte en tecnología, logística eficiente y prácticas sostenibles están surfeando esta ola. Un buen ejemplo es el avance de los marketplaces, que ofrecen múltiples opciones en un solo entorno y desafían al comercio tradicional a elevar su nivel de servicio. Mientras tanto, las empresas que ignoran estos cambios se convierten en rehenes de un modelo de negocio cada vez menos viable
La experiencia del consumidor también está siendo redefinida. Si antes las marcas dictaban las reglas, ahora son los consumidores quienes dirigen la narrativa. Chatbotscon inteligencia artificial, programas de fidelidad personalizados y entregas ultrarrápidas están moldeando esta nueva realidad. Pero es importante prestar atención, porque la tecnología sin humanización puede generar desconfianza. La personalización debe ir más allá de recomendaciones basadas en algoritmos – necesita crear una conexión genuina
Al fin y al cabo, El Día del Consumidor de 2025 no debe ser recordado solo desde el aspecto del consumo. Debemos reflexionar sobre un mercado que necesita evolucionar para acompañar a un cliente cada vez más exigente, informado y consciente. El juego ha cambiado, y solo quien entienda esta nueva dinámica seguirá en el tablero